HONDA 125 CG

Esta preciosa Cafe Racer Vintage se realizó a partir de una Honda 125 CG de serie. 

Lo primero que hicimos fue "desnudar" la moto de todos los elementos originales como depósito, sillín, guardabarros, fibras, etc. Y le empezamos a buscar un nuevo "vestido". Así pues, el depósito provino de una vieja Derbi Antorcha. Más adelante os explicaremos porqué elegimos ese depósito. 

El sillín fue una transformación de un asiento de Vespa, el cual modificamos hasta conseguir el resultado deseado. Los guardabarros, aunque parezca mentira, son de Vespino, recortados y moldeados para adaptarlos a su nuevo uso. 

También eliminamos todo el cuadro de instrumentos y dotamos a nuestra CG de un solo cuenta-kilómetros cromado, montado sobre una pletina de aluminio pulido, donde también encontramos la llave de contacto y unas luces led indicadores de punto muerto, luces largas e intermitentes.

El faro tipo led, así como los intermitentes y retrovisores , se importaron de Indonesia. El manillar es de tipo turismo, mucho más bajo y plano que el original, recortado 3 cm por cada lado. El doble piloto trasero es de procedencia nacional.

También se realizó en aluminio pulido el cubrecadenas, ya que en la moto original era de plástico.

La horquilla delantera, en un principio de color plata, se pintó negra satinada, y le acoplamos unos fuelles de goma.

El caballete lateral fue de fabricación propia, ya que Honda no suministra este elemento.

Al haber sido eliminada la caja del filtro y las fibras que lo recubrían, optamos por hacer una única base para la batería, que de esta manera pasa a ir montada en el centro del chasis, y totalmente a la vista. El filtro de aire es ahora de tipo cartucho cónico.

Todas las conexiones fueron unificadas en el mismo lugar y camufladas en una caja metálica, a la cual añadimos el detalle de una tabla de surf, ya que el propietario de la moto es un gran aficionado a este deporte.

Los reposapiés traseros originales en fundición de aluminio se desecharon y construimos unos nuevos soportes en tubo soldado con el mismo acabado que el basculante. El latiguillo de freno delantero es ahora metálico.

Como comentamos antes, el depósito elegido, (el cual también se tuvo que acoplar), era de una Derbi Antorcha. Se trata de un depósito que es muy hueco en su parte inferior, lo cual nos permitió alojar las partes electrónicas, así como el extractor de gases quemados de la culata y que en el modelo de serie está totalmente a la vista.

Para el tubo de escape, respetamos la curva y a partir de ahí acoplamos y modificamos un silenciador IXIL de un ciclomotor. Evidentemente se aumentó el diámetro de salida y se rellenó de estropajo de acero inoxidable. Cosa que hace que emita un bramido sensacional, sin llegar a ser molesto.

Así que ya sabes, si sueñas con algo exclusivo y de cualquier cilindrada, no dudes en ponerte en contacto con CLASMOTOS. Para nosotros será un placer hacer realidad tu sueño.